viernes, abril 19

Catalunya aprueba su primera ley de la ciencia: 8 claves para escuchar

  • El nuevo marco, enfocado específicamente al ámbito de la investigación, busca potenciar el I+D+iy acabar con la precariedad del sector

Cataluña acaba de dar luz verde sabía primera ley de la ciencia: él abecedario libro marco normativo catalán enfocado específicamente al ámbito de la investigación. Hacía años que la comunidad científica reclamaba una normativa para amparo los derechos de los trabajadoresseguir con el precariedad del sector y reducir la carga administrativa y la burocracia asociada a las actividades científicas. La nueva ley catalana, aprobada oficialmente este miércoles por el Parlament con 117 votos a favor y 10 en contra, recogge todas estas utiliza y se propone «situar el I+D+i entre las prioridades políticas, sociales y económicas del país».

noticias relacionadas

Según anotó la memoria técnica de la normativa, la nueva ley de la ciencia de Catalunya despliega un conjunto de medios legales y economicos por impulsivo tanto la investigación básica como la transferencia de conocimiento e innovación. Implícito todo ello «reformar» el ecosistema en el que incluyen desde los centros científicos públicos y privados, como a las universidades y el tejido empresarial. En este sentido, también se aspira a «coordinar» los esfuerzos de todos los actores del sistema científico catalán.

estas hijo las 6 llaves de la nueva ciencia de Cataluña.

Uno de los principales puntos de inflexión que marca la aprobación de esta ley tiene que ver con las mejoras laborales para el científico e investigador personal de Cataluña. El nuevo marco normativo planta, de hecho, una serie de medidas para luchar contra la precariedad de los investigadores, dar estabilidad a la carrera profesional y promover la renovación generacional en los centros de investigación. En este sentido también se plantan herramientas para promover el «generación, retención y atracción» talentoso.

El nuevo marco legal también se compromete a reformar el modelo de financiación en ciencia. Por un lado, haciendo un»esfuerzo economico publico sostenido en el tiempo«que garantice la estabilidad de los proyectos de investigación. Y por otro lado, promoviendo las inversiones del sector privado. En este sentido, una de las medidas estrella será el refuerzo del mecenazgo cientifico: un sistema que facilita las donaciones de empresas a la ciencia y que, se ha sabido, supone un incentivo fiscal para los actores privados.

Uno de los ejes transversales de esta ley es la promoción de la ciencia abierta. Es decir, un modelo de investigación basado en la transparencia. Según este paradigma, tanto los científicos como los centros de investigación deben publicar de forma accesible los resultados de su trabajo y ponerlos tiene disposición de ciudadanía. Esto ayudará tanto para comentar la visibilidad de las investigaciones como para «evitar duplicar esfuerzos» con otros trabajos.

La ley destaca entre sus principales objectivos el fomento de la igualdad de genero entre hombres y mujeres en la carrera científica. Para ello se contempla, entre otros, la aprobación de aeronaves genero en los centros, el incorporación de la perspectiva geno en todas las fases de la investigación y la inclusión de personas expertas en general en todos los órganos de evaluación y asesoramiento.

Colaboración entre científicos y políticos

Otra de las novedades de esta ley tiene que ver con fortalecer la colaboración entre científicos y políticos. En este sentido, la normativa aprobada este miércoles prevé «Reforzar el uso de la evidencia científica«en el diseño de las políticas públicas. I+D+ia los órganos políticos de la Generalitat.

Comité de Integridad

La aprobación de la ley da luz verde al llamado Comité per la Integritat de la Recerca a Catalunya, un órgano totalmente autónomo y diseñado specíficamente para garantizar el objetoimparcialidad y etica de la investigacion cientifica. Este órgano velará por las buenas prácticas en el proceso de investigación. También será el encargado de hacer frente a los posibles conflictos éticos y deontológicos que puedan suscitarse en el sector científico.