Corea del Norte está bajo duras sanciones internacionales por sus programas de armas nucleares y misiles balísticos, y su economía se ha visto afectada aún más por los estrictos cierres fronterizos autoimpuestos destinados a detener los brotes de covid-19.
El alcance de la escasez de alimentos en Corea del Norte no está claro, pero en un informe de enero, el Proyecto 38 Norte de EE. UU. dijo que la inseguridad alimentaria estaba en su peor momento desde las hambrunas que devastaron el país en los años 1990.
«La disponibilidad de alimentos probablemente ha caído por debajo del mínimo indispensable para las necesidades humanas», dijo el informe.
La búsqueda de la autosuficiencia de Corea del Norte significa que casi todo su grano se produce en el país, pero eso ha dejado al país vulnerable, descubrió 38 North.
“Irónicamente, lograr una producción agrícola adecuada en los suelos desfavorables de Corea del Norte ha generado una fuerte dependencia de los productos importados y ha dejado al país expuesto a conmociones globales, disputas diplomáticas e inclemencias del tiempo”, indica el informe.
Parte de la solución a largo plazo de los problemas radica en resolver el estancamiento sobre las armas nucleares y las sanciones, pero también requiere reformas económicas.
Lanzar reformas económicas internas liberaría la capacidad productiva de Corea del Norte y le permitiría exportar bienes y servicios industriales comerciables, ganar divisas e importar granos a granel sobre una base comercialmente sostenible, dijo 38 North.
