Este domingo, el técnico ítalo-brasileño Thiago Motta, al frente de la Juventus, se enfrentará a su antiguo club, el Inter de Milán, en el clásico conocido como el 'Derby de Italia'. El partido se disputará en el Estadio Giuseppe Meazza y es crucial para ambos equipos en la lucha por el título.
El Nápoles cierra la clasificación con 19 puntos, seguido del Inter con 17 y la Juventus con 16, lo que ha convertido este partido en uno de los más importantes de la temporada.
Thiago Motta, que jugó en el Inter entre 2009 y 2012 y formó parte del equipo que ganó el triplete con José Mourinho, ahora regresa como entrenador establecido tras su traslado a Bolonia. Sin embargo, su equipo ha mostrado debilidades últimamente.
La Juventus sufrió su primera derrota de la temporada en la Liga de Campeones ante el Stuttgart (0-1) y aunque se mantiene invicta en la Serie A, su desempeño es preocupante, con sólo dos victorias en sus últimos seis partidos.
Desafíos para la Juventus
Las lesiones complican la situación del plantel, que sólo cuenta con 17 jugadores de campo. Entre los lesionados se encuentran el brasileño Bremer, con rotura del ligamento cruzado; el holandés Teun Koopmeiners, con una lesión en una costilla; y el argentino Nico González, estuvo de baja hasta noviembre por un problema en el cuádriceps. Además, la presencia de Douglas Luiz es incierta debido a una lesión muscular.
El Inter intenta recuperarse
El Inter también afrontó desafíos, ya que no tendrá que lidiar con el defensa Francesco Acerbi, lesionado en el último partido contra la Roma. Sin embargo, el técnico Simone Inzaghi espera recuperar al centrocampista Hakan Calhanoglu. Para el duelo del domingo, el Inter se enfrentará a Piotr Zielinski y Nicolò Barella, dos jugadores clave.
Este partido promete ser un espectáculo apasionante, con ambos equipos buscando consolidar sus posiciones en lo más alto de la tabla.