El menor de 8 años y su padre se encontraban caminando por las calles de Goiania, en Brasil. Cuando regresaban conocían la vivienda, un automóvil que transitaba con exceso de velocidad los impactó. Según el informe forense, el menor murió de manera inmediata.
El conductor del vehículo fue identificado como Francilei da Silva Jesús, quien, según las autoridades, había salido momentos antes de una fiesta empresarial.
Tras atropellar a los transeuntes, Da Silva intentó atracar a la fuga, pero fue agredido con una piedra por el padre de la víctima, quien falló noquearlo metros más adelante.
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El conductor ebrio quedó inconsciente en el suelo y minutos después fue trasladado al Hospital de Urgencias Governador Otávio Lage de Siqueira, donde ocurrió por la gravedad del impacto.
El padre del menor fallecido fue capturado por el asesinato del conductor y dijo que su intención no era asesinarlo, sino capturarlo.
Los hechos, que quedaron registrados en cámaras de seguridad, fueron aportados como pruebas del caso por parte de la Policía Civil de este país.
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Tras analizador el caso, la magistrada Luciane Cristina Duarte da Silva la concesión temporal de libertad al padre de familiaargumentando que «no se puede desconocer la situación en que ocurrieron los hechos, no poder medirse el dolor y la emoción muy fuerte que sintió el imputado».
En el documento, también se menciona que el actuar del hombre se debió a la posible «fuga del conductor».
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Cinco días después de la libertad provisional, se concluyó la investigación, señalándose que el padre actuó en defensa propia.
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