El gobernador de Virginia, Glenn Youngkin, ordenó el miércoles 100 tropas de la Guardia Nacional a la frontera sur para ayudar a interceptar el tráfico de drogas y personas a pedido del gobernador de Texas, Greg Abbott.
En un comunicado el miércoles, Youngkin dijo que había firmado una directiva ejecutiva para enviar tropas a la frontera en apoyo de la Operación Lone Star de Abbott. En marzo, Abbott pidió a otros gobernadores republicanos que enviaran tropas a la frontera sur a través de un contrato de Asistencia para el Manejo de Emergencias, que permite a los estados enviar recursos para desastres o crisis. Youngkin citó el aumento del flujo de drogas ilegales y el tráfico de personas a través de la frontera que, según dijo, está «devastando a las familias y comunidades de Virginia».
“La crisis fronteriza actual que enfrenta nuestra nación ha convertido a cada estado en un estado fronterizo”, dijo Youngkin. “A medida que fallan las soluciones de liderazgo a nivel federal, los estados están prestando atención al llamado para asegurar nuestra frontera sur, reducir el flujo de fentanilo, combatir la trata de personas y abordar la crisis humanitaria”.
Youngkin dijo que su movimiento se produce después de una sesión informativa de Abbott la semana pasada.
“Dadas las demandas intensivas de recursos en Texas, los peligros planteados por la crisis del fentanilo y el impacto de la crisis fronteriza en la actividad criminal de la Commonwealth, Virginia hará su parte para ayudar al Estado de Texas en los esfuerzos del despliegue coordinado de Virginia National. Mantenga soldados para ayudarlos con aspectos clave de su misión”, dijo Youngkin.
La oficina de Abbott no respondió de inmediato a la solicitud de comentarios de NBC News.
La directiva ejecutiva de Youngkin se produce después de que el gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, anunciara este mes que enviaría a más de 1.100 agentes de la ley y miembros de la Guardia Nacional a la frontera de EE.UU. Texas con México. El número se ha multiplicado por diez desde un movimiento similar en 2021.
El anuncio de DeSantis se produjo semanas antes del lanzamiento de su campaña presidencial de 2024 la semana pasada. La oficina de DeSantis en ese momento dijo que el personal estaría en la frontera durante 30 días, con posibles extensiones.
Abbott y DeSantis culparon al presidente Joe Biden por la afluencia de inmigrantes en la frontera sur. DeSantis firmó un amplio proyecto de ley de reforma migratoria un día antes de que la administración de Biden terminara con el Título 42, una restricción de Covid que aceleró la deportación de inmigrantes. Mientras tanto, Abbott transportó a los inmigrantes a las ciudades demócratas y le dijo a la alcaldesa de Chicago, Lori Lightfoot, en una carta este mes que la medida era necesaria «hasta que Biden asegure la frontera para detener la afluencia de la migración masiva».